Las tormentas registradas en los últimos días en Navarra han aliviado ligeramente la situación de los secanos de la Comunidad Foral, según se recoge en el informe semanal elaborado por el Departamento de Agricultura, Ganadería y Alimentación, correspondiente a la semana comprendida entre los días 6 y 13 de mayo.
Desde el punto de vista meteorológico, este periodo se ha caracterizado por el registro de lluvias generales de carácter tormentoso principalmente, temperaturas acordes con la época y vientos variables.
En la Ribera Alta y Baja, Navarra Media y sur de Tierra Estella, áreas con mayor déficit hídrico, las precipitaciones acumuladas en estos días superan los 20 l/m² que, aunque en muchos casos sea ya tarde e insuficientes, permite en cierto modo mejorar la recortada campaña augurada para estas zonas, siempre y cuando la climatología siga acompañando. En cotas más septentrionales (Pirineos, Cuenca de Pamplona, zona, Noroccidental y Tierra Estella), con estas lluvias se ha asegurado una culminación satisfactoria en la formación del grano en cebadas y en menor media en trigos, que presenta fenologías más retrasadas. En este cultivo, a pesar de que se espera una buena campaña, el rigor del invierno ha provocado que su porte sea algo menor que en campañas anteriores y, a su vez, destacar negativamente la presencia masiva de plantas de cebada en los campos de trigo. También cabe resaltar algunos encamados en cebadas, ocasionados por las fuertes precipitaciones de carácter tormentoso registradas en estas zonas.
En cuanto a otros cultivos, bastantes parcelas de leguminosas (guisantes, habas) han alcanzado especial desarrollo y evolución, a pesar de que las heladas han condicionado su porte y desarrollo. Las colzas y brassicas que han conseguido resistir la mala campaña se encuentran en final de floración y comienzo de fructificación. Sin embargo en áreas del Norte, aunque las lluvias caídas han sido bien recibidas por las iniciadas siembras de maíz forrajero y por las praderas en general, estas precipitaciones han provocado que en la zona de Pirineos los multiplicadores de patata con destino a Opposa, esperen adecuados temperos que les permitan iniciar las siembras de este cultivo. A su vez, se ha visto interrumpida la campaña de recolección y ensilado de hierba en las zonas ganaderas por excelencia de Navarra (Ultzama, Baztan, Larráun o Sakana), así como la siembra de maíz forrajero en dichas zonas.
Para los cultivos hortícolas y de regadío, las precipitaciones de estos días tienen diferente repercusión. En general, esta climatología lluviosa (que ha estado en torno a los 30 l/m2 en las comarcas de La Ribera) y con temperaturas primaverales, incide de manera favorable en el desarrollo y calidad de varias hortalizas que ahora se recolectan como alcachofa, espárrago, bróculi, espinaca o haba verde, u otras que están próximas a comenzar su recolección, como guisante verde. Estas precipitaciones también favorecen las nascencias, enraizamiento y crecimiento de los cultivos ya instalados (ajos, cebolla, ensaladas, etc.) o de recientes siembras y plantaciones (maíz, arroz, tomate, pimiento, etc.). Las lluvias también son necesarias para ahorrar riegos y aumentar las reservas de agua actuales.
Para los regadíos de Tierra Estella (área de Cabredo) las reservas de agua serán suficientes para sus cultivos de remolacha, que ha tenido unas excelentes nascencias y desarrollo, así como la patata tardía, cuyo inicio de siembra se ha visto interrumpido, o para el tabaco, cuya plantación comenzará la próxima semana.
Pamplona, 13 de mayo de 2005
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.