Unos 30.000 salmones maduros, de unos 2,5 kg se han escapado de sus jaulas en unas instalaciones en West Loch Roag, en la costa occidental de Escocia. Este incidente puede dañar a las especies salvajes, ya que se ha producido en el peor momento posible, cuando los salmones se acercan a las costas para ir a desovar a los ríos. Aunque los salmones que se crían en jaulas son de la misma especie que los salvajes, tienen poco que ver, mientras que los priemros son muy gordos, los segundos son mucho más delgados. Una mezcla entre ambos provocaría un perjuicio genético a los salmones salvajes.

En los últimos 6 meses se han escapado salmones de sus jaulas en 4 ocasiones. En total, 100.000 salmones huidos de diferentes instalaciones de la costa oeste de Escocia. La Asociación escocesa de Pesca de Salmón quiere presentar una queja a la Comisión Europea, dado que la última escapada de salmones se ha producido muy cerca de un área especial de conservación y próximo del río salmonero Grimestra.