La administración italiana ha solicitado a la UE que introduzca una norma que prevea la indicación obligatoria del origen de la materia prima en las etiquetas del tomate en lata y los productos transformados.

En la campaña de transformación 2010, los precios en origen, particularmente en el sur de Italia, disminuyeron a la mitad, que unido a que en 2011 entrará en pleno vigor el mecanismo de ayudas totalmente desacopladas, ha puesto al sector en gran dificultad, según su Ministerio de Agricultura. Consideran que la única forma de defenderse de las importaciones baratas y crecientes de concentrado de China es a través de la calidad de su producto, lo que tiene que verse diferenciado en el etiquetado.

El sector del tomate para industria en Italia cuenta con 8.000 explotaciones agrícolas, con más de 80.000 ha de superficie, 20.000 puestos de trabajo, 170 industrias de transformación y un valor industrial de más de 2.000 millones de euros, según publica el Boletín Exterior del MARM.