En 2013, el consumo de energías renovables en la UE fue un 15% del consumo total de energía. Este porcentaje ha crecido desde el 8,3% en 2004 (primer año del que se tiene datos) y se espera que aumente aún más, hasta llegar al 20% que es el objetivo de la UE en 2020.

En todos los países de la UE se ha registrado una tendencia al alza en el consumo de energías renovables, pero el crecimiento ha sido desigual. Suecia está a la cabeza y a gran distancia del resto, con un consumo de renovables del 52% del total. Le siguen Letonia (37.1%), Finlandia (36.8%) y Austria (32.6%). En contraste, los porcentajes más bajo se registran en Luxemburgo (3.6%), Malta (3.8%), Holanda (4.5%) y Reino Unido (5.1%).

España coincide con la media comunitaria. Su consumo de renovables en 2004 fue de un 8,3% del total, en 2013 subió a 15,4% y su objetivo nacional para 2020 es del 20%.

No todos los estados miembros tienen el mismo objetivo nacional de consumo de renovables en 2020. Los más elevados corresponden a Suecia (49%), Letonia (40%), Finlandia (38%), Austria (34%), Portugal (31%) y Dinamarca (30%). En el otro extremo, con los objetivos iguales o menores del 15% están Reino Unido, Polonia, Holanda, Eslovaquia, Hungría, Chipre, Bélgica y República Eslovaca, Luxemburgo y Malta.

Algunos países ya han conseguido sus objetivos nacionales para 2020 (Bulgaria, Estonia y Suecia) o están muy próximos a alcanzarlos (Lituania, Rumania e Italia). Por el contrario, a otros les queda todavía un largo camino (Reino Unido, Holanda, Francia e Irlanda).

La UE tiene también el objetivo de que en 2020, al menos un 10% de los combustibles usados en el transporte sea de origen renovable. Algunos países ya han cumplido el objetivo (Suecia) o están próximos a conseguirlo (Finlandia). Por el contrario, hay otros que en 2013 menos de un 1% del combustible usado en el transporte era renovables, como es el caso de España (0,4%), Portugal y Estonia.