La Conselleria de Agricultura de la Comunidad Valenciana ha articulado medidas de apoyo al sector cunícola ante la difícil situación por la que atraviesa, por medio de la concesión de ayudas directas a los cunicultores, con el objeto de proporcionarles liquidez a corto plazo. Se pretende contribuir a la continuidad de la actividad de sus explotaciones, en tanto que el mercado no se reequilibre y los precios comiencen a recuperarse, para evitar la desaparición de esta actividad ganadera.

Los cunicultores llevan muchos meses vendiendo los conejos en vivo por debajo de los precios de coste de producción, lo que ha generado una situación de descapitalización de las familias que se dedican a la cunicultura, con el cierre de muchas explotaciones y la pérdida de puestos de trabajo en zonas desfavorecidas de interior.

La ayuda de la Conselleria de Agricultura y Medio Ambiente ha consistido en otorgar una subvención de 4 euros por coneja reproductora, a partir del censo de hembras reproductoras que consten en el Registro de Explotaciones Ganaderas (REGA) de la Comunitat Valenciana el 1 de abril de 2016, con la condición de que la explotación disponga de más de 200 conejas reproductoras. De esta medida se podían beneficiar en principio 142 explotaciones de la Comunitat Valenciana, con un censo de 102.000 conejas reproductoras.

Se han presentado un total de 139 solicitudes, de las cuales siete no cumplen los requisitos. Tres no cumplen con el requisito de censo y cuatro con el requisito de estar al corriente de pagos con Hacienda y la Seguridad Social, por lo que se han admitido a trámite 132 solicitudes.

El importe global de subvención para estas 132 solicitudes es de 382.688 euros, como parte de los 450.000 euros previstos para estas ayudas a la cunicultura en la orden de bases publicada en septiembre de este mismo año.

Esta es la primera vez que este sector dispone de unas ayudas públicas específicas para dotar de liquidez a sus granjas. El sector cunícola en la Comunitat Valenciana tiene una importancia estratégica, dado que las granjas están ubicadas en zonas rurales donde no existen otras alternativas económicas. El apoyo a este sector contribuirá a mantener los puestos de trabajo y la actividad agraria en las zonas rurales de interior de la Comunitat Valenciana.