La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) ha hecho público su avance climático de la primavera de 2021, que tuvo un carácter cálido y muy seco en el conjunto de España. Ha sido la cuarta primavera más seca desde el inicio de la serie histórica en 1961, y la segunda más seca del siglo XXI, tan solo por detrás de la del año 2005.
Más concretamente, la pasada primavera ha sido muy seca. Se han acumulado 114,5 l/m2 a lo largo del trimestre en el conjunto de la España peninsular, un valor que supone el 67% del valor normal del período de referencia, es decir, las dos terceras partes. La primavera fue seca o muy seca sobre todo en el tercio norte y mitad occidental peninsular, así como en Canarias. Llegó a ser extremadamente seca en el este del País Vasco, Navarra y noroeste de Huesca. Por el contrario, las precipitaciones fueron superiores a los valores normales, llegando incluso a duplicarlos, en el sur de la Comunidad Valenciana, Región de Murcia y extremo oriental de Andalucía. En Baleares tuvo un carácter normal.

Las lluvias fueron especialmente escasas a lo largo del mes de marzo, que fue el más seco del siglo XXI y en el que llovió poco más de la tercera parte de lo normal; abril estuvo en torno al promedio, aunque hubo un gran contraste entre el tercio norte de la Península, con muy pocas lluvias, y el sureste, donde se llegó a triplicar el valor habitual. Mayo volvió a ser seco en casi toda España, salvo en el extremo sudoriental, donde de nuevo las precipitaciones fueron abundantes.
Esta escasez de lluvia en la mayor parte del país excepto en el sureste de la Península se puso de manifiesto en las efemérides: se trató de la primavera más seca de la serie en tres observatorios (Rota, en Cádiz; Hondarribia-Malkarroa, en Gipuzkoa y en el aeropuerto de Huesca), mientras que fue la más lluviosa en el aeropuerto de Alicante-Elche. Además, en Castellón-Almassora se registró la primavera con mayor número de días de lluvia.
La temperatura media de la primavera fue, en el conjunto de la España peninsular, de 12,5ºC. Un valor 0,4ºC superior al promedio del período de referencia 1981-2010, lo que indica su carácter cálido. Se trató de la vigésima primavera más cálida desde el inicio de la serie, en 1961, aunque a lo largo del siglo XXI se han registrado once primaveras con mayor temperatura. No en vano, ocho de las diez primaveras más cálidas en España han tenido lugar en este siglo.
Pues en el norte de teruel la mas humeda.