El Departamento de Agricultura de Aragón publica hoy en el BOA la orden por la que se aprueba la convocatoria para complementar para el año 2021, las subvenciones concedidas en materia de modernización de las explotaciones y de instalación de jóvenes agricultores, con cargo al Fondo de Inversiones de Teruel (FITE).

Esta convocatoria permite completar el porcentaje de la subvención recibida por realizar inversiones auxiliadas en las convocatorias ordinarias de incorporación y modernización en el marco del Programa de Desarrollo Rural (PDR), que de media se sitúa en un 44,86% de la inversión, al 60% máximo autorizado por la normativa comunitaria.

Lo que se complementa son los pagos recibidos por las inversiones realizadas desde octubre de 2019 hasta febrero de 2021. Las inversiones realizadas y pagadas en ese periodo corresponden a diferentes convocatorias de ayuda y ascienden a una inversión total de 3,9 millones de euros. Lo agricultores y ganaderos turolenses ya han cobrado 1,8 millones de euros (el 44,86% antes mencionado) por realizar dicha inversión y ahora con la ayuda FITE llegarán al 60%, lo que supondrá un total cobrado por esa inversión de 2,4 millones de euros.

Los beneficiarios son 107 agricultores y ganaderos y la convocatoria está dotada con 600.000 euros de fondos FITE financiados a partes iguales entre la Administración General del Estado y el Gobierno de Aragón.

Los interesados sólo deberán presentar la solicitud en el sentido de que les interesa la ayuda, puesto que al ser una ayuda complementaria a la recibida en las convocatorias ordinarias la documentación y justificación ya ha sido registrada por el Departamento de Agricultura.

El FITE atiende la situación de especial vulnerabilidad de la provincia de Teruel y pretende fomentar el desarrollo económico de la provincia y la corrección de los desequilibrios existentes, disponiéndose así de financiación adicional para los proyectos ubicados en su territorio.

En el caso concreto de estas ayudas, la intención es dotar a la provincia de Teruel de capital productivo, elevar su nivel de renta y favorecer la realización de inversiones en las explotaciones agrarias que contribuyan a una agricultura más productiva, competitiva y desarrollada que promueva la sostenibilidad del medio rural y la ordenación del territorio, a través de la vertebración sectorial y el fomento de la innovación y, en consecuencia, creando puestos de trabajo.