En la reunión de Consejo Agrario Provincial celebrado ayer 28 de septiembre en Valencia de Don Juan, presidido por el Delegado Territorial de la Junta de Castilla y León, Eduardo Diego, se ha informado de que la firma del acuerdo para la entrega de las fincas de reemplazo de la concentración parcelaria de Los Oteros, se retrasa hasta mediados de octubre, y que ese retraso se debe exclusivamente a que no han concluido los trabajos de amojonamiento de las nuevas parcelas. La Consejería de Agricultura entiende que sin estar las fincas amojonadas, desde un punto de vista legal, no se pueden entregar las nuevas parcelas a sus propietarios. Los recursos que se han presentado al acuerdo de reordenación parcelaria, publicado en el BOP el 11 de agosto, y que ASAJA espera se resuelvan favorablemente, siguen su curso y no son un obstáculo para avanzar en el proceso.

Para ASAJA esta demora ocasiona perjuicios muy importantes a los agricultores, ya que las nuevas parcelas necesitan muchas labores agronómicas para poderse sembrar  a lo largo de los dos próximos meses (periodo normal en las siembras de los cultivos de invierno en tierras de secano), y ahora es un momento idóneo para el laboreo en las mismas ya que con la lluvia caída en septiembre hay buen tempero. Los retrasos en la ocupación de las nuevas fincas pueden ocasionar que una amplia superficie se deje sin sembrar o se siembre en condiciones no idóneas, y consecuencia de ello conllevar pérdidas muy importantes para estos agricultores de secano que están saliendo de un mal año agrícola como ha sido 2023, por lo que no se pueden permitir otro año sin cosecha.

Dado que el acuerdo para la toma de posesión de las nuevas parcelas va a ser inminente, y dado que el tiempo apremia para hacer las labores de siembra, ASAJA pide a los agricultores de Los Oteros que se pongan de acuerdo entre ellos y hagan el tránsito a las nuevas fincas de reemplazo, en las 33.000 hectáreas concentradas,  desde ya mismo. Esta recomendación de ASAJA se hace salvaguardando los intereses de los agricultores que pudieran tener fincas sin recolectar, por ejemplo de girasol o de alfalfa, y salvaguardando el trazado de caminos que van a desaparecer, si no se han trazado los nuevos. La zona concentrada, de 33.000 hectáreas, representa aproximadamente el 33% de la superficie de cultivos herbáceos en secano en la provincia de León, lo que da una idea de su magnitud