Un nuevo complejo de enfermedades ha comenzado a afectar de forma preocupante al cultivo de remolacha azucarera en algunas regiones de Alemania, provocando una notable caída en los rendimientos. Se trata de la aparición simultánea de dos enfermedades causadas por bacterias fitopatógenas: el Stolbur y el Síndrome de Baja Riqueza (SBR), causadas por las bacterias Candidatus Phytoplasma solani y Candidatus Arsenoponus phytopathogenicus.
Ambas bacterias se transmiten a través de cicadélidas de alas vidriosas —conocidas comúnmente como chicharritas o saltahojas—, pequeños insectos hemípteros que se desplazan con rapidez entre cultivos y cuya expansión se ha acelerado en los últimos años. Lo singular del actual brote es la coincidencia de los dos patógenos en una misma campaña, complicando el manejo fitosanitario al no existir tratamientos directos contra las bacterias.
El Ministerio alemán de Agricultura ha advertido que estos insectos vectores han ampliado su espectro de plantas hospedantes más allá de la remolacha azucarera, incluyendo también cultivos como patata, zanahoria y otras hortalizas, en los que pueden desarrollarse completamente, dificultando así su control.
Actualmente, no existen productos fitosanitarios registrados para su uso en remolacha contra este vector, lo que ha llevado al Ministerio a conceder varias autorizaciones de emergencia de productos fitosanitarios con diferentes principios activos y mecanismos de acción que aseguren un control sostenible, que se recogen en el cuadro adjunto:

Uno de los principales desafíos es que las cigarras no aparecen en una sola oleada, sino en varias fases a lo largo del ciclo del cultivo, y la transmisión de los patógenos puede producirse de forma muy rápida. A esto se suma que el número de plantas hospedantes continúa creciendo. Por ello, en Alemania se ha puesto en marcha un sistema de monitoreo integral que permite identificar los picos regionales de vuelo para planificar intervenciones más eficaces.
Desde el Ministerio alemán subrayan la necesidad de desarrollar estrategias coordinadas a nivel regional y sectorial para frenar la expansión del complejo bacteriano. Estas deben incluir todas las medidas actualmente disponibles, sin descartar enfoques combinados entre distintos cultivos. Además, se están llevando a cabo proyectos de investigación a escala federal y estatal para identificar nuevas herramientas de control que permitan contener esta amenaza para el cultivo de remolacha.
Política de comentarios:
Tenemos tolerancia cero con el spam y con los comportamientos inapropiados. Agrodigital se reserva el derecho de eliminar sin previo aviso aquellos comentarios que no cumplan las normas que rigen esta sección.