Un estudio elaborado por LA UNIÓ de Llauradors, con datos del Ministerio de Agricultura, demuestra que los productores de vino de la Comunitat Valenciana son los que menos perciben por su cosecha de vino de todo el Estado.

Los viticultores de la Comunitat Valenciana han cobrado de media en lo que llevamos de campaña alrededor de 2,60 €/hectogrado, lo que supone un 17% menos que un viticultor murciano, un 8% menos que un viticultor castellano manchego o un 9% menos que la media.

La cotización media de referencia de salida de bodega del vino tinto valenciano es casi un 1% inferior al de la campaña pasada, pero más del 41% respecto de la campaña 2012-2013 y eso que la producción es sensiblemente más baja y en teoría los precios habrían de ser mejores.

Resulta sorprendente a juicio de LA UNIÓ, tras un análisis de la evolución semanal de los precios publicados por el Ministerio de Agricultura, que en la Comunitat Valenciana -a diferencia del resto de mercados autonómicos o provinciales o autonómicos- existen largos periodos de tiempo que pueden durar más de dos meses donde el precio que se paga no varia absolutamente, lo que “puede hacer sospechar que existen acuerdos para manipular la oferta y perjudicar al productor”.

LA UNIÓ critica que esta situación se repite campaña tras campaña sin que nadie haga nada por evitarla. “Estamos hartos de ser los que menos cobremos por nuestro vino y desde la Conselleria de Agricultura no se haga nada por revertir esta situación. Nos vanagloriamos de ser líderes nacionales de exportación de vino pero únicamente en volumen porque en valor estamos a la cola, lo que perjudica enormemente al agricultor”, según LA UNIÓ.