La Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) reclama a Miguel Arias Cañete la búsqueda de soluciones para un problema al que ningún Gobierno, hasta la fecha, ha sido capaz de dar respuesta y ponga en marcha un gasóleo profesional de verdad para los Agricultores y Ganaderos a Título principal

Según los datos que ha podido recoger la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) el gasóleo agrícola, en la tercera semana de agosto de 2012, ha superado la barrera del euro por litro, al situarse su precio en los 1,002, impuestos incluidos, subida que se va a ver incrementada de forma importante a partir del 1 de septiembre.

Esta Organización reclama al Ministro de Agricultura, Alimentación y Medio Ambiente, Miguel Arias Cañete, que convierta buscar una solución a este tema en una de las prioridades de su cartera y ponga en marcha un gasóleo profesional de verdad, para los Agricultores y Ganaderos a Título Principal, una de las promesas incumplida del anterior Gobierno y que algunos parece que han olvidado que era una de las medidas estrellas del famoso Plan de Choque presentado en 2010 que determinadas organizaciones corrieron a alabar y que se ha quedado reducido a mesas y mesas, reuniones y más reuniones… pero sin medidas serias para atajar y aliviar la crisis de rentabilidad que soportan miles de explotaciones.

Si llevamos estos datos al trabajo diario de un agricultor, esta situación supone que, sólo en un año, regar una hectárea de regadío en Castilla y León, con un consumo medio de 1.000 L, ha pasado de los 890 euros de 2011 a los más de 1.000 en la campaña actual, lo que equivale a una subida de más del 10% en poco más de 12 meses meses, circunstancia esta que se acentúa con el hecho de que los Agricultores y Ganaderos a Título Principal no puedan repercutir estas subidas en la venta de los productos obtenidos en las explotaciones.

El incremento del precio del gasóleo es especialmente grave esta campaña en la que se está produciendo una dura sequía a la que se han unido en buena parte del verano temperaturas más elevadas de lo normal lo que está provocando que el gasto de este carburante en los motores de riego sea más elevado que en una campaña ordinaria, circunstancia que merma la rentabilidad de los cultivos de regadío, siendo especialmente grave en la remolacha que, además, ha visto como Silvia Clemente eliminaba la ayuda de tres euros por tonelada que se había anunciado como apoyo al sector con carácter retroactivo.

Por último, la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) recuerda que un número muy importante de los robos que se producen en el medio rural y las explotaciones agrarias se centran en este carburante y es indudable que estas subidas hace más atractivo este producto para estos delincuentes, por lo que el daño es doble para quienes se dedican a la actividad agrícola y ganadera.