Tras la presentación de la propuesta por la Comisión Europea en el día de ayer, la Unión de Campesinos de Castilla y León (UCCL) rechaza frontalmente la idea de Bruselas de modificar la fiscalidad que afecta al gasóleo agrícola.

En este sentido, y según las primeras informaciones que se han podido recoger, los máximos responsables de la Unión Europea están planteando modificar la Directiva actual de Impuestos sobre los productos de la energía y la electricidad (Directiva 2003 / 96 / UE), en el sentido de crear nuevos impuestos que graven a las distintas actividades económicas en base a la emisión de CO2 de cada una de ellas así como modificar las especiales condiciones fiscales que en la actualidad tiene el gasóleo agrícola.

Desde esta Organización se considera que, de aprobarse cualquiera de esas medidas, se podría estar dando un golpe durísimo a la economía de los agricultores y ganaderos de esta región que llevan ya más de dos años soportando una crisis de rentabilidad tremenda que está llevando al cierre a miles de explotaciones.

UCCL ha reclamado en infinidad de ocasiones a José Luis Rodríguez Zapatero que cumpla con la promesa realizada de poner en marcha un gasóleo profesional para el sector agrario algo que no ha hecho, ni parece que vaya a hacer nada para impedir que la Unión Europea apruebe una propuesta que elimina las condiciones especiales que regulan el carburante que emplean los profesionales que se dedican a esta actividad.

La amenaza de esta decisión se cierne sobre unos profesionales a los que cada vez cuesta más dinero llenar el depósito de gasóleo de su tractor a tenor de los máximos históricos en los que se encuentra en estos momentos pues no se puede olvidar que llenar ahora mismo el depósito de un tractor no se realiza por menos de 73 euros, teniendo en cuenta que el precio actual del carburante puede rondar los 0,916 euros por litro