La Comisión Europea ha aprobado un régimen de ayudas a las actuaciones de las organizaciones interprofesionales que había sido notificado por Francia, considerando que son compatibles con las reglas de ayudas de estado.

Se trata de las ayudas financiadas por las denominadas “cotizaciones voluntarias de devolución obligatoria” (CVO) que pagan los agentes del sector a las organizaciones interprofesionales y que se utilizan en actuaciones como asistencia técnica, campañas de promoción, investigación etc.

La Comisión entiende en su decisión que las CVO son equiparables a tasas parafiscales, es decir de recursos públicos, y que su aprobación por parte de las autoridades mediante el reconocimiento de las interprofesionales es un requisito imprescindible.