El antioxidante genisteína, presente en la soja, podría detener el desarrollo del cáncer de próstata, según un estudio que se acaba de publicar en la revista de la asociación americana de investigación del cáncer

Según el estudio, realizado en ratones, una cantidad de genisteína no superior a la que sería equivalente a la que podría ingerir una persona que tuviera una dieta rica en soja, reduce la metástasis del cáncer de próstata en un 96%, lo que significa prácticamente detener su crecimiento.

En estudios previos se ha visto que la genisteína detiene el crecimiento de células humanas de cáncer de próstata en cultivo celular. Los resultados del estudio sugieren que la genisteína podría ser un medicamento prometedor para el tratamiento de este tipo de cáncer.

La genisteína atrae desde hace tiempo el interés de los científicos por sus posibles efectos en cuanto a la prevención del cáncer y las enfermedades cardiovasculares. Es uno de los fitoestrógenos del grupo de las isoflavonas

La población de extremo oriente tiene una incidencia mucho menor de cáncer de mama y de próstata que la europea, algo que según algunos autores podría ser debido al alto consumo directo de soja de los asiáticos.