La filial australiana de Parmalat ha solicitado a la Agencia de Seguridad Alimentaria de Australia y Nueva Zelanda que se apruebe el uso de fitoesteroles de tall oil como un nuevo ingrediente en los productos lácteos desnatados o semidesnatados. La industria basa su solicitud en que estos fitoesteroles tienen la propiedad de reducir el colesterol.

El tall oil es un subproducto de la industria de la celulosa y los fitoesteroles obtenidos a partir de éste tienen dos aplicaciones: como intermediarios químicos para la producción de bases esteroidales que permiten obtener hormonas sexuales y corticales y en la elaboración de productos que disminuyen la concentración de colesterol en humanos.

Actualmente, la Agencia de Seguridad Alimentaria de Australia y Nueva Zelanda tiene autorizados el uso de los fitoesteroles de tall oil y los ésteres de fitoesterol derivados de aceites vegetales en margarinas y cremas para extender. Las margarinas y cremas que los contienen solo pueden ser consumidas en ciertas cantidades y tienen que ser etiquetadas como «no aptas para niños ni para mujeres embarazadas o en lactación», así como indicar «las personas que tomen medicamentos para reducir el colesterol precisan consejo médico antes de su uso».