El consejero Juan Carlos Suárez-Quiñones, en su condición de consejero de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural de la Junta de Castilla y León presentó el viernes un modelo alternativo para la aplicación de prácticas agroambientales de la nueva PAC, más acorde con la agricultura y la ganadería de España que ya ha sido remitido hoy mismo al Ministerio de Agricultura. El modelo ha sido el fruto del trabajo con las organizaciones profesionales agrarias representativas de Castilla y León (Asaja, Alianza UPA-COAG y la Unión de Campesinos de Castilla y León) y la Unión Regional de Cooperativas Agrarias de Castilla y León (Urcacyl).
Se trata de un modelo alternativo, más sencillo, adaptado a las distintas realidades productivas españolas, más atractivo para el agricultor y que asegure que no se pierdan fondos europeos en España, a diferencia del presentado por el Mapa, ha señalado el Consejero.
El modelo de Castilla y león responde a los siguientes principios:
- Es universal y por lo tanto puede acogerse a él cualquier agricultor o ganadero.
- Es atractivo para que tenga acogida y para ello una misma práctica medioambiental no puede estar valorada de igual manera para todas las regiones productivas, dependerá de ellas.
- Incluye un componente incentivador necesario para atraer al máximo número de agricultores al modelo.
- Es más simple tanto para el agricultor como para la Administración.
- Permite que se puedan desarrollar prácticas agroambientales en el segundo pilar de la PAC (que es el tercer escalón de ambición ambiental de la nueva PAC). Si se cubren las prácticas con los ecoesquemas se restringirá la ambición medioambiental en el segundo pilar.
¿Cómo sería el modelo propuesto por Castilla y León?
Se trata de un único ecoesquema ‘integral’ de la explotación con el que se pueda conseguir:
- Un importe incentivador al acogerse al ecoesquema.
- Una lista de prácticas de carácter ambiental a elegir.
- Un conjunto de pagos adicionales por las prácticas elegidas que se determinarán como un porcentaje de la ayuda básica de la región productiva en la que se encuentre la superficie.
- Limitación del pago por ecoesquema a un porcentaje máximo de la ayuda básica. Desde la Consejería se propone el 50%, que se ajustaría proporcionalmente al importe total de la asignación para ecoesquema del primer pilar.
El pago incentivador y los pagos adicionales se podrían establecer también a través de un sistema de contraprestación por puntos, y en función de la escala que se determine, definir el pago del ecoesquema integral de la explotación como un porcentaje de la ayuda básica que corresponda al titular.
El pago por incentivo ‘a tanto alzado’ se aplicaría a todas las superficies agrícolas de la explotación, con criterios específicos que deben respetarse en función de las características de las superficies de la misma. Este pago atrayente al modelo es completamente necesario para tener respuesta en la acogida de agricultores a estas prácticas sostenibles (ecoesquema), que es la intervención novedosa del nuevo modelo de ayudas directas y por ello es necesario incentivar para atraer a más agricultores al mismo.
El modelo incluye 28 prácticas de carácter ambiental, que se pueden desarrollar en las explotaciones agrarias del conjunto de Castilla y León y de España. Entre ellas se pueden destacar:
- Aprovechamiento a diente de los pastos por la ganadería respetando unas cargas ganaderas en la superficie.
- Regeneración y protección de sistemas adehesados.
- Rotación espacial de los cultivos de especies diferentes.
- Incluir en la alternativa cultivos mejorantes como: vezas, alfalfa, esparceta…
- Establecer y/o mantener elementos característicos del paisaje.
- Creación de hábitats seminaturales de carácter anual.
- Siembra directa y mínimo laboreo.
- Mantener cubiertas vegetales sobre el terreno.
- Empleo de la fertilización orgánica en las explotaciones.
¿Cómo es el modelo de ecoesquemas presentado por el Estado?
El Ministerio de Agricultura ha presentado un modelo en el que se incluye una lista de nueve ecoesquemas, encasillados en diferentes modelos de agricultura. Cada uno de ellos tiene requisitos a cumplir y se retribuyen prácticamente todos con un pago dirigido a compensar costes idénticos en toda España, es decir, al final con un pago por hectárea único.
El modelo incluye compatibilidades e incompatibilidades entre los distintos ecoesquemas y cada cual tendrá una asignación de fondos específica.
En definitiva, un modelo encasillado, complejo tanto para el agricultor como para la Administración, que tendrá que comprobar anualmente el cumplimiento de los requisitos y centrado en una ayuda fija por hectárea para todos los beneficiarios.
Con este planteamiento complejo de exigir más y no incentivar la aplicación de estas prácticas, y compensar solamente con un importe determinado, se correrá el riesgo de no ser atractivo para los agricultores y de que pueda desembocar en una pérdida de financiación europea en España ha concluido el Consejero.
Mas burocracia ,obligaciones y gastos para el agricultor, mientras a lo que traen de otros paises no les imponen ningun requisito mediombiental. Complicar mas la vida del agricultor ,como sino tubiera ya bastante con las sequias, pedriscos , bajos precios,altos costes de produccion….
Totalmente de acuerdo, cada vez más burocracia. La agricultura no necesita limosnas de la PAC, lo que necesita es que si en Europa se ponen unas normas muy estrictas, también las cumplan los productos importados.
Si no cumplen las normas europeas no se importan, PUNTO. Os aseguro que no iba a entrar ningún producto a bajo precio como ocurre ahora.