La organización agraria ASAJA, que impartió ayer una reunión informativa con agricultores y ganaderos de Valderas y municipios limítrofes, ha valorado positivamente que el Plan Hidrológico del Duero, aprobado hace una semana por el Gobierno (sin el consenso del sector agrario), contemple el desarrollo de nuevos regadíos en Valderas y Gordoncillo aprovechando el agua de Riaño a través del Canal de la Margen Izquierda del Porma. ASAJA recuerda que ha sido firme defensora de esta infraestructura y así lo ha planteado en las alegaciones que hizo tanto a este como al anterior Plan Hidrológico, lo que contrasta con posturas ambiguas o contrarias de otras organizaciones agrarias de la provincia, así como de la propia Comunidad de Regantes de la M.I. del Porma y de su presidente Matías Llorente. Una vez que existe la concesión de agua para desarrollar este regadío en unas mil hectáreas de tierras de cultivo, ASAJA pide a la Junta que apruebe de una vez por todas el estudio de impacto ambiental, y que saque a licitación las obras.

En esta reunión informativa en una zona cerealista de agricultura de secano, como es Valderas y su área de influencia, ASAJA puso de manifiesto el elevado coste de los abonos minerales ahora que comienzan las labores de incorporar el nitrógeno a los cereales y otros cultivos herbáceos. Mientras que los abonos nitrogenados están bajando de precios en los mercados internacionales, en nuestro país las bajadas son mínimas, lo que obedece a una situación de oligopolio por parte de las empresas españolas, encabezadas por Fertiberia. Si las autoridades españolas no ponen cartas en el asunto para garantizar un verdadero libre mercado en la venta de fertilizantes, la consecuencia va a ser que los costes de producción en España serán superiores a los de otros territorios, lo que restará competitividad al campo. Para ASAJA, es aquí donde tiene que actuar el Gobierno, y no en otras medidas de gasto público que no dejan de ser parches que solucionan muy poco.