La Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG) y la Federación de Consumidores y Usuarios (CECU) han presentado una denuncia ante la Dirección General de Consumo del Ministerio de Derechos Sociales por el presunto incumplimiento de la normativa de etiquetado en tomates cherry vendidos en supermercados españoles. Ambas entidades reclaman la apertura de una investigación y la imposición de sanciones a las empresas responsables si se confirma el fraude.
Los productos cuestionados son tomates cherry comercializados por la empresa Azura, que posee más de 400 ha de invernaderos en producción en el Sáhara Occidental. Según la denuncia, estos tomates están siendo etiquetados con el origen «Marruecos», a pesar de proceder del Sáhara Occidental, y han sido detectados en establecimientos de la cadena Carrefour en España. Esta práctica ya fue denunciada en Francia y estaría extendiéndose al mercado español.
Según CECU, el etiquetado actual vulnera el derecho de los consumidores a recibir información veraz sobre el origen real de los alimentos, especialmente cuando se trata de productos recolectados en un territorio no reconocido como parte del Reino de Marruecos. La organización recuerda que la trazabilidad es obligatoria conforme a la normativa comunitaria.
Desde COAG se advierte además de que estas prácticas suponen una competencia desleal para los productores españoles. La organización denuncia que, pese a que la empresa produce en el Sáhara Occidental, nunca ha aparecido una etiqueta indicando dicho origen. Reclaman que las certificadoras y autoridades competentes verifiquen el punto exacto de producción para garantizar el cumplimiento legal.
La sentencia europea sobre el etiquetado
El pasado 4 de octubre, el Tribunal de Justicia de la Unión Europea dictaminó que los melones y tomates producidos en el Sáhara Occidental no pueden etiquetarse como productos de Marruecos. Según la sentencia, este territorio es distinto al del Reino de Marruecos y constituye un territorio aduanero independiente a efectos del Derecho de la Unión. En consecuencia, cualquier etiquetado que induzca a pensar lo contrario puede inducir a error al consumidor.
Tanto COAG como CECU consideran que el actual Acuerdo de Asociación entre la UE y Marruecos vulnera los derechos de los consumidores europeos al dificultar la identificación clara del origen de ciertos productos agrícolas. Reclaman una aplicación estricta de la sentencia y el refuerzo de los controles sobre la trazabilidad.
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