El verano de 2025 estuvo marcado en Ucrania por condiciones climáticas desiguales que condicionaron la evolución de los cultivos. En las provincias del sur y el este, la falta de precipitaciones redujo notablemente los rendimientos de verano, mientras que en el norte y el oeste la disponibilidad de agua y la ausencia de episodios de calor extremo sostuvieron mejores perspectivas de rendimiento, aunque con retrasos en el desarrollo.
El comienzo seco del verano impactó de manera negativa en las fases finales de los cultivos de invierno en las provincias centrales. En el oeste, las lluvias excesivas de julio retrasaron la cosecha y afectaron la calidad de cereales y colza. Así, las previsiones de rendimiento de los cultivos de invierno resultan algo inferiores a la media. Sin embargo, la producción de trigo (27,8 Mt, +18 % respecto a 2024 y +5 % frente al promedio quinquenal) y de colza (3,7 Mt, en torno a la media) se mantiene por encima de la media de cinco años gracias al incremento de la superficie sembrada. La cebada, en cambio, se sitúa en 6,2 Mt que aunque es un 7% más que en 2024 está un 16 % por debajo de la media quinquenal, reflejando la fuerte reducción de la superficie cultivada.
En los cultivos de verano, la sequía persistente en el sur y este afectó gravemente a maíz, girasol y soja, mientras que las regiones del norte y el oeste lograron mantener su potencial productivo por la humedad suficiente del suelo. El maíz destaca con una previsión de 32,1 Mt (+18 % sobre 2024 y +2 % sobre la media), con un rendimiento estimado de 7,3 t/ha, superior al promedio de los últimos cinco años. En el caso de la soja, el aumento de superficie cultivada con respecto a la media de los últimos 5 años, hasta 2,58 Mha respalda una producción de 6,5 Mt, ligeramente inferior a 2024 pero un 51 % por encima del promedio quinquenal.
En el girasol, principal oleaginosa del país, los rendimientos previstos se sitúan en 2,08 t/ha, un 7 % por debajo de la media de los últimos cinco años, consecuencia de la sequía en las zonas de mayor implantación. Aun así, el aumento de superficie cultivada sostiene una producción total de 13,6 Mt, prácticamente en línea con el promedio.
En conjunto, Ucrania presenta un panorama agrícola marcado por contrastes: cereales de invierno como trigo y colza con balances positivos, frente a la caída de cebada, y cultivos de verano como maíz y soja con buenos resultados gracias al rendimiento y la expansión de superficie, mientras que el girasol queda condicionado por el impacto de la sequía en el sur del país.

Los datos del Ministerio de agricultura de Ucrania:
Al 12.09.2025 los agricultores han cosechado 29,15 mln t de cereales, legumbres y oleaginosas de 7 mln ha (62%):
.- trigo – 22,189 mln t de 5,008 mln ha (98%) con un rendimiento de 4,4 t/ha; (21,7 mln t en 2024/25).
.- cebada – 5,290 mln t de 1,345 mln ha (98%) con un rendimiento de 3,9 t/ha; (5,5 mln t en 2024/25).
.-colza – 3, 246 mln t de 1,274 mln ha (101%) con rendimiento de 2,5 t/ha. La cosecha está terminada. (3,4 mln t en 2024/25).
Según las estimaciones de los analistas de la asociación ‘Club Ucraniano de Negocios Agrarios del 20.08.2025, se espera que la cosecha total de cereales y oleaginosas en Ucrania para la campaña 2025/26 alcance los 73,4 mln t (-5% en comparación con el año pasado).
La cosecha de cereales se pronostica en 54,6 mln t (-3% en comparación con el año pasado), y la de oleaginosas en 18,8 millones de toneladas (-11%).
.- la cosecha de maíz será de 26,7 mln t (casi igual en 2024/25),
.- la cosecha de soja podría ser de 5,4 mln t (6 mln t en 2024/25),
.- de pipas de girasol – 10,1 mln t (otras agencias ucranianas esperan 13,6 mln t).