Según publicó el diario Financial Times el pasado 31 de diciembre, el personal de la compañía Bayer deberá ser protegido de posibles ataques por parte de grupos contrarios a la biotecnología mediante zonas de exclusión especiales en el caso de celebrarse protestas anti-OMG, según ha determinado un tribunal británico. Las zonas de exclusión son de 100 yardas a la redonda de los domicilios de los empleados y de un kilómetro cuadrado de las sedes de la empresa.

La orden, que se deberá adoptar definitivamente tras una audiencia judicial el próximo 11 de febrero, impone una serie de restricciones a las manifestaciones de ciertas organizaciones activistas y limita ciertas actividades dirigidas a los empleados como fotografías, vídeos o ciertas utilizaciones del correo electrónico.

La compañía había denunciado acciones intimidatorias como bloqueos de correo electrónico, destrucción de cerraduras, ocupación de locales y ataques contra vehículos de los trabajadores.