Según un estudio de la Universidad de Michigan titulado “La biotecnología y el agricultor africano” (Biotechnology And The African Farmer) la biotecnología tiene un enorme potencial para ayudar a los pequeños agricultores africanos, aportando además beneficios al medio ambiente y a los consumidores de esos países. El estudio concluye que las inversiones en biotecnología agraria deberían ser una prioridad para el desarrollo económico de África, incluyendo la investigación, la capacidad normativa y la aplicación de normas de bioseguridad.

El estudio analiza las causas de porque la mayoría de los gobiernos africanos no invierten en métodos modernos de agricultura productiva y cuales son los recursos financieros, de infraestructura y asesoramiento que deberían emplearse en ayudar a África a sumarse a la revolución biotecnológica.