Según un informe de la Universidad de Wageningen (Holanda), realizado por encargo del Gobierno Holandés, la producción de carne certificada procedente de animales que no hayan consumido alimentos que contengan trazas de OMG es extremadamente costosa y muy difícil de llevar a cabo de una forma económicamente viable en gran parte de las explotaciones.

El sector de los alimentos denominados biológicos, orgánicos o ecológicos tiene autoimpuesta la norma de no poder utilizar en las producciones ganaderas alimentos que contengan OMG, que son por otro lado comunes en la ganadería convencional sin que tengan que etiquetarse en la UE los productos animales obtenidos como producidos utilizando OMG.

Lo que encarece la producción es el concepto de cual es el significado de ser “libre” de OMG y la intolerancia total de este tipo de producción con los OMG, no ya en lo que se refiera a su uso, sino también en cuanto a la presencia adventicia, la cual se considera que impurifica estos productos.